La intervención temprana con enfoque en neurodesarrollo se centra en brindar capacitación y terapia especializada a niños que presentan trastornos en las primeras etapas de la vida. Este enfoque considera los desafíos únicos de cada niño y se basa en estrategias y técnicas diseñadas para abordar sus necesidades específicas. El objetivo es promover el desarrollo óptimo del cerebro y las habilidades cognitivas, motoras, emocionales y sociales de los niños, maximizando su potencial y mejorando su calidad de vida a lo largo del tiempo.
La identificación temprana de necesidades a nivel motor y biomecánico implica observar las habilidades motoras gruesas y finas, como gatear, caminar y agarrar objetos, tomando en consideración la calidad y coordinación del movimiento.
La identificación temprana es esencial para intervenir de manera oportuna y proporcionar terapia y apoyo adecuados cuando sea necesario. Esto puede ayudar a prevenir problemas a largo plazo y mejorar la funcionalidad y calidad de vida de los niños.